El Dépor gana en el último suspiro y se ve ya en Primera

SE IMPUSO EN TARRAGONA CON UN GOL DE XISCO EN EL MINUTO 94

• Si este jueves el Valladolid pierde con el Recre, los gallegos consumarán su ascenso

• Y si no, el domingo Riazor podría celebrar la vuelta a Primera división ante el Huesca

• Partidazo de Fernando Morán, que con 36 años mantuvo al colista cerca del triunfo...

• ... y de Dani Aranzubia, que salvó en varias ocasiones al líder del segundo gol

  Con un gol de Xisco en el minuto 94 de partido consiguió el Deportivo imponerse al colista de la categoría, un Gimnástic que un par de minutos antes tuvo el gol del triunfo en las botas de Álvaro Rey. Mucho sufrimiento, mucha agonía pero al final la fiesta se desató entre los deportivistas en el terreno de juego.
  Una victoria, por tanto, lograda 'in extremis' y con mucho sufrimiento pero que deja a los gallegos con pie y medio en Primera división. De hecho, si este mismo jueves en el partido que cierra la jornada el Valladolid perdiese con el Recreativo en el Nuevo Zorrilla, el Dépor ya sería matemáticamente equipo de Primera. Y, si no fuera así, el partido del próximo domingo ante el Huesca en Riazor podría ser el del añorado ascenso un año después de perder la categoría.
  Xisco Campos había adelantado a los catalanes muy pronto, a los doce minutos, al culminar una gran acción del equipo local. Pero la remontada del líder la inició Bruno Gama con el tanto del empate a la media hora... justo después de que Aranzubia sacase un balón que ya se colaba tras el buen cabezazo de Fernando Morán, de largo el mejor del encuentro. Así, del posible 2-0 se había pasado al 1-1, en una especie de adelanto de lo que iba a ocurrir al final del primer tiempo.
  Un empate con el que se llegó al descanso 'por culpa' de Dani Aranzubia, ya que antes del descanso el gran portero riojano salvó a su equipo del segundo tanto con dos grandes intervenciones ante Raúl Fuster, a quien sacó sus dos remates, el segundo prácticamente a bocajarro.
  Un poco antes y tras la lesión de Zé Castro, que se lesionó al poner un gran centro al que no llegó Lassad, el marcador pudo moverse dos veces en apenas un minuto, pero primero Rubén Pérez evitó el 1-2 con una gran intervención y después a punto estuvo Dani Abalo, jugador cedido por el Celta, de aprovechar un gran centro de Morán, pero su remate salió rozando el poste. La última la tuvo Morel, pero su volea antes de acabar el primer tiempo y en inmejorable situación se 'marchó a las nubes'.
  Tras el descanso y con la entrada de Riki al terreno de juego, el líder creó más ocasiones de peligro, tuvo más el balón en su poder y se le vio más decidido a ir a por el triunfo y no dejarse presionar por el triunfo previo de un Celta que se había situado a un solo punto antes del choque.
  Sin embargo, cierta precipitación y la falta de puntería impidieron a los de Oltra ponerse en ventaja, tras fallar el propio Riki un cabezazo con todo a favor, tras rematar muy desviado Guardado tras un gran regate dentro del área por querer colocar el balón demasiado, tras evitar Rubén Pérez con una mano prodigiosa una falta que Morel ya colaba junto al larguero y tras no poder rematar desde el suelo Xisco un balón muerto que parecía pedir entrar en la portería.
  Así se llegó a un final con una gran intensidad, pero la calidad de unos y otros acabó decidiendo el choque. Alvaro Rey, para los locales, tuvo dos grandes ocasiones para haber anotado el 2-1, pero no anotó en ninguna, pese a ser doble la última. Por cierto, en ambas oportunidades la acción partió de un inconmensurable Fernando Morán, que a sus 36 años recién cumplidos volvió a demostrar que tiene 'cuerda para rato' y mantuvo a su equipo muy cerca del triunfo hasta el final.
  Y por el contrario y en el último suspiro, Xisco si acertó a rematar dentro del área pequeña un gran centro de Guardado pegado a la línea de fondo al que no llegó a despejar la defensa grana. Si del posible 2-0 se pasó en el primer tiempo al 1-1... al final se pasó del más que posible 2-1 al definitivo 1-2. Las cosas del fútbol.